Por Jessica Mesa Duarte

Si hacemos un repaso de los resultados de la semana de la cultura matancera, los festejos por el aniversario 325 de la fundación de Matanzas y la jornada por el Día de la Cultura Nacional, podemos afirmar que por estos días la ciudad pareció un sitio diferente.

En primer lugar hay que destacar la labor de los organizadores de las actividades. Como pocas veces había sucedido, al menos 5 años atrás, disfrutamos de opciones que se cumplieron casi al cien por ciento y, si algún elemento falló, como sucedió porque hablamos de una obra humana, fue mínimo.

Entre ellos la no realización de la anunciada presentación de Raúl Torres junto a Kelvis Ochoa por razones que aún no fueron aclaradas aunque, puertas adentro, los matanceros comentaron sobre el desconocimiento de los artistas sobre el tema y hasta algún que otro asunto económico, o la no llegada del audio contratado por la Dirección municipal de Cultura a una noche de pasarela del evento Puro Arte, pasión por la artesanía.

Como elementos negativos también se debe señalar el problema, que no solo en temas culturales, sino en la vida diaria, lastra esta ciudad: el transporte. Y es que, podemos ofrecer ofertas de exquisito gusto, podemos organizar perfectamente cada detalle de nuestras opciones, podemos hasta bajar la luna que si el sistema de transportación no responde de poco servirán nuestros esfuerzos por darle a la población una programación de lujo.

Durante las celebraciones por su aniversario 325, Matanzas fue declarada ciudad turística

Otro factor en contra de desarrollo de estas acciones se evidenció el propio 20 de octubre, cuando las personalidades del arte y las letras matanceras disfrutaban de un recorrido por las obras restauradas y en la taberna La Vigía a la representante de la agencia de turismo Gaviota se le ocurrió poner reggaetón a altos niveles. No bastó esta manifestación de ultraje a lo mejor de las tradiciones musicales cubanas, justo el Día de la Cultura.

Acierto Juvenil ofrece interpretaciones de danzones representativos de nuestra cultura a personalidades de las artes y las letras matanceras en el Día de la Cultura Cubana

Cuando los directivos de Cultura provincial solicitaron que se bajaran de inmediato los niveles de audio porque en ese mismo momento en los portales del teatro Sauto la orquesta Acierto Juvenil ofrecía una selección de danzones emblemáticos de nuestro pentagrama, sencillamente se sintieron ellos con el derecho de ir en contra de tal petición y, no obstante, aumentaron más el volumen.

Que nadie malinterprete mi reclamo de que se analicen fenómenos de este tipo. Matanzas acaba de ser declarada Ciudad Turística, pero las ofertas, propuestas y actividades propias de la empresa del ocio en la provincia nunca deben ir contra del desarrollo y conservación de nuestra cultura, sino servirse de ella, respetuosa e intencionadamente, para mostrarle al mundo lo mejor de nuestra identidad y no lo peor como sucedió en este lamentable caso.

Concierto de Síntesis en la remozada Plaza de la Vigía

Críticas fuera, desde el mismo 10 de octubre comenzaron las propuestas culturales. La población matancera y los visitantes asistieron a momentos muy especiales; conciertos como el de Síntesis, el de Guido López Gavilán y su Camerata Música Eterna, el de la orquesta Miguel Failde junto a Omara Portuondo, las presentaciones de los repentistas, los grupos folclóricos, La Colmenita, todos con una excelente asistencia; eventos nacionales y provinciales que demostraron que en Matanzas sí existe público para todo tipo de actividades.

Una expresión del vasto acervo cultural de esta ciudad se representó en la gala Matanzas 325, concierto en 3 tiempos.

Reconocimiento especial merece la gala Matanzas 325, concierto en tres tiempos, dedicada al aniversario de la urbe que, aun cuando existieron opiniones desfavorables de los yumurinos en cuanto a su participación como espectadores directos de la presentación por la incomodidad de estar parados con niños durante varias horas, lo cierto es que fue un espectáculo en el que se evidenció la altísima factura del arte matancero.

Compañía Revolution, del coreógrafo de la televisión cubana, Roclan, en la Plaza de la Vigía

La jornada de la cultura demostró entonces cuánto se puede hacer en pos de elevar el nivel cultural de nuestro pueblo, ofrecerle opciones de calidad que sirvan al mismo tiempo a su esparcimiento y disfrute sano.

Presentaciones culturales en las principales plazas públicas de Matanzas

Durante su habitual recorrido, los «matanceros ausentes» apreciaron la renovación de la ciudad donde nacieron. En la imagen disfrutan de la presentación de Atenas Brass Ensemble en el Palacio de Junco